4 prácticas Clave para Prolongar la Vida Útil de los Equipos

El buen mantenimiento y cuidado de los equipos es esencial para asegurar su durabilidad y funcionamiento eficiente. A continuación, se detallan cinco prácticas clave que deben implementarse para prolongar la vida útil de los equipos:

1) Inspección Periódica:
Es fundamental realizar inspecciones regulares de los equipos para identificar posibles problemas antes de que afecten su rendimiento. La frecuencia de la inspección depende del tipo de producto:
•Productos de alta rotación: La inspección debe realizarse cada seis meses.
• Productos de baja rotación: Se recomienda una inspección anual.
Durante la inspección, es importante verificar que:
El producto no presente manchas ni esté contaminado por agentes externos.
2) Limpieza Preventiva:
Mantener los equipos limpios es crucial para evitar acumulación de agentes dañinos que puedan comprometer su funcionamiento. Es recomendable:
•Eliminar polvo, suciedad y escombros que puedan acumularse sobre o dentro del equipo, instrumento, válvula y accesorio.
•Prestar especial atención a la grasa, aceites y cualquier tipo de residuos líquidos externos que puedan afectar las partes móviles.
• Utilizar productos de limpieza adecuados, evitando el uso de sustancias corrosivas o abrasivas.
3) Revisión de las Condiciones Climáticas:
Los equipos, instrumento, válvula y accesorio son sensibles a su entorno, por lo que es necesario realizar revisiones diarias de las condiciones ambientales en las que se encuentran:
Evitar goteras y la exposición a la humedad que puede generar oxidación y deterioro en componentes internos.
Proteger los equipos de la luz solar directa ya que puede generar sobrecalentamiento, decoloración y degradación de materiales como plásticos y gomas.
Monitorear la ventilación del lugar, asegurando que los equipos se mantengan a una temperatura adecuada y sin cambios bruscos.
4) Cumplimiento de las Especificaciones y/o recomendaciones del Fabricante
Cada equipo viene con especificaciones particulares que deben respetarse para garantizar su durabilidad:
Seguir las recomendaciones de uso y mantenimiento indicadas en el manual del fabricante.
• No sobrepasar los límites de carga, temperatura o presión que el equipo puede soportar.
• Realizar las revisiones y reparaciones sugeridas según el ciclo de vida recomendado.
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